Mi esposo dejó de tener sexo conmigo el día que nos casamos. Soy una mujer de 49 años que se casó con un hombre cariñoso y atento hace diez años, después de vivir juntos durante un año y medio. A veces, era emocionalmente abusivo con episodios de ira. Fuera de eso, es físicamente cariñoso, me besa y me abraza; sin embargo, en nuestro matrimonio no hemos tenido sexo, salvo dos o tres veces en diez años. Me siento rechazada y sola, y anhelo intimidad sexual.
Ahora estoy entrando en la menopausia, al borde de la depresión por haber desperdiciado el final de mi juventud en un matrimonio sin sexo. Tuve una aventura de una noche con una amiga que me recordó cuánto me gusta el sexo. Lamento profundamente haberle sido infiel a mi esposo, pero por otro lado, me siento engañada por la falta de intimidad sexual en nuestro matrimonio. Me deprime que este sea mi futuro, pero si me voy, temo quedarme completamente sola, sin ningún tipo de afecto, buscando una pareja compatible. No quiero envejecer y morir sin haber vivido la intimidad sexual después de los 40.
Joan responde:
Creo que ya sabes la respuesta. Si te vas, puede que encuentres lo que buscas o puede que no. Si no te vas, seguro que no lo encuentras. Tu marido ha estado negándote sexo durante toda la década que lleváis casados. No has dicho si habéis hablado del tema o acudido a terapia, pero está claro que no se ha resuelto.
Creo que sabes la respuesta. Si te vas, puede que encuentres lo que quieres, o puede que no. Si no te vas, ¡te aseguro que no lo encontrarás! Tu marido ha estado negándote a tener sexo durante toda la década de vuestro matrimonio. No has dicho si has podido hablar de ello o si has recibido terapia, pero está claro que no ha habido solución.
